jueves, 25 de octubre de 2007

Bienvenidos a la Sección Ganadería

Ganadería

Cría de animales que tiene como objeto obtener un aprovechamiento de los mismos. Es importante diferenciarla de la cría de animales de compañía o de la de especies amenazadas, por ejemplo, que no se corresponden con el concepto tradicional de ganadería. Se habla de ganadería, normalmente, cuando los animales se desarrollan en un estado de domesticación, siendo su aprovechamiento, principalmente, el de la carne, la leche, el cuero, los huevos, entre otros productos. La acuicultura puede identificarse como un tipo de ganadería acuática.
Además de la actividad, también se denomina ganadería al conjunto de instalaciones de una explotación ganadera, o al conjunto de reses de un propietario o instalación.


Historia de la ganadería

Para asegurar sus necesidades de alimento, cuero, huesos, etc, el hombre primitivo cazador debía seguir en sus migraciones a los grandes rebaños de bóvidos, cérvidos y otros animales. Hace unos 10.000 años los seres humanos del neolítico descubrieron que capturar animales, domesticarlos y mantenerlos vivos para utilizarlos cuando fuera preciso, les permitía reducir la incertidumbre que, en relación con las posibilidades de alimentación, les suponía el hecho de tener que depender de la caza. El proceso debió constar de un periodo de predomesticación en el que, en un primer momento, los seres humanos habituaron a sus presas a su presencia mientras las seguían en sus búsquedas de alimento para, posteriormente, irlas reteniendo; esto supuso que ellos mismos tenían que encargarse de suministrar alimento a los animales. Así, consiguieron domesticar varias especies, encargándose de mover los rebaños de unas zonas de pasto a otras, emulando los movimientos naturales de los mismos, pero ahora bajo su control. Este sedentarismo estuvo unido al nacimiento de las prácticas agrícolas, que ligaban al hombre a la tierra y que, además, permitían el cultivo de forraje para los animales: había nacido la ganadería.
La domesticación de animales permitió también utilizarlos para realizar trabajos agrícolas o transportar cargas. Además, sus excrementos se podían emplear como fertilizante y los restos de las cosechas que no eran utilizables en la alimentación humana podían aprovecharse como alimento para el ganado.
La agricultura y la ganadería permitieron a las poblaciones humanas conseguir una mayor certidumbre respecto a sus posibilidades de sustento, así como reducir el esfuerzo en obtenerlo, lo que posibilitó un mayor desarrollo cultural, ya que el ser humano podía entonces empezar a disponer de más tiempo para la creación intelectual। En este sentido, parece que el desarrollo de la ganadería tuvo lugar en Oriente Próximo, precisamente en zonas donde, a su vez, el desarrollo cultural fue más intenso y temprano. La cabra, la oveja y la vaca fueron algunas de las primeras especies en ser domesticadas.

Ganadería extensiva e intensiva

Más recientemente, el desarrollo científico y tecnológico ha permitido aumentar la eficacia en la cría de ganado mejorando las condiciones sanitarias y, en general, las condiciones de mantenimiento de los animales. Esto ha llevado al desarrollo de la ganadería intensiva frente a la tradicional forma extensiva de aprovechamiento.
La ganadería extensiva consiste en la cría y mantenimiento de los animales en extensiones más o menos amplias por las que los animales vagan con cierta libertad buscando su propio alimento o siendo suplementados con aportes extraordinarios. La cría intensiva, por el contrario, se realiza en un régimen de concentración y, en casos extremos, los animales nunca llegan a salir de las naves de cría y engorde de las granjas.

Especies ganaderas

Se distinguen varios tipos de ganadería en función de las especies, por otra parte variadas, objeto de explotación. Así, además de la ya conocida cría de ganado vacuno, ovino o caprino, se puede distinguir la cría de conejos (cunicultura), la de aves (avicultura), etc. Casos peculiares los constituyen la apicultura, ya que se trata de la cría extensiva de un insecto, o la lombricultura, que se desarrolla para la obtención de mantillos. En la actualidad existen incluso explotaciones dedicadas a la cría de grillos para su uso en la alimentación de animales de compañía tan peculiares como los reptiles. Otras ganaderías son las desarrolladas con destino a la industria peletera, siendo su máximo exponente la cría de visones.

Las Razas

Las distintas razas ganaderas han surgido como consecuencia de un proceso de selección llevado a cabo por el ser humano para obtener un rendimiento óptimo de los diferentes productos ganaderos. Así, por ejemplo, en el ganado vacuno existen razas típicamente lecheras (como la frisona), otras propias de la producción de carne (la retinta), otras desarrolladas para el empleo de la fuerza animal, e incluso otras seleccionadas para actividades tan peculiares y apartadas en principio del origen de la ganadería como pueda ser la fiesta taurina। Además, las razas responden a necesidades específicas según la zona, ya que no todas se pueden criar en todas las regiones, especialmente en lo que a la ganadería extensiva se refiere.

Razas vacunas de leche: raza Myr, raza Groninga, raza Frisona y derivadas, raza Pardo Alpina, raza Simmenthal y raza Roja Danesa.

Razas vacunas especializadas en la producción de leche rica en grasa: raza Ayrshire, raza Jersey, raza Guernesey, raza Normanda, raza Kerry y raza Bretona.

Razas vacunas cosmopolitas especializadas en la producción de carne: raza Durham o Shorthorn, raza Hereford y raza Aberdeen Angus.

Razas vacunas europeas de carne francesas e italianas: raza Charolesa, raza Maine d' Anjou, raza Rubia de Aquitania, raza Limusina y raza Romañola.


La ganadería y el medio ambiente

Esta actividad ha estado siempre ligada de modo muy directo a la naturaleza, si bien el desarrollo de la ganadería intensiva en régimen de estabulación la ha independizado del medio exterior. No obstante, especialmente en los casos de explotaciones con densidades altas, se producen residuos, los purines, que pueden ser reutilizados para la producción de abonos agrícolas pero que pueden, también, ocasionar importantes problemas de contaminación si no son adecuadamente tratados.
La ganadería extensiva puede ser, por otro lado, un sistema de explotación altamente compatible con la conservación del medio natural, al hacer un uso del territorio a baja concentración que no tiene por qué acarrear problemas importantes de concentración de residuos, a la vez que, en muchos casos, las fincas ganaderas se convierten en pequeñas reservas naturales.


SECCIÓN GANADERÍA
(procesos productivos en ganadería)

Profesores encargados:
  • Jorge Varela.
  • René Varela.
Cursos a los que se dicta clase en esta materia:
  • 5º y 6º año.

Actividades que se realizan en el espacio:

  • Producción de leche (aproximadamente 900 litros por semana).
La sección cuenta con las siguientes herramientas o dispositivos:
  • Equipos de ordeñe (sala de ordeñe, sala de máquinas, etc.).
  • Instalaciones para manejo de hacienda (corrales, manga, cepo, balance, etc.)
  • Animales: vacas de ordeñes, vacas secas, vaquillonas, novillos, terneros/as , etc.).
  • Pasturas.

Productos:

  • Primario: leche.
  • Secundario o derivados: queso, crema, yogur, dulce de leche, flan, etc.

Los productos que se destinan al consumo en el comedor del colegio, es una parte de la leche producida, y el resto se lo destina para la venta al público y a la elaboración de los productos lácteos; estas ventas se realizan en la proveduría de la escuela.

Cantidad de animales: En la actualidad se cuenta con 128 animales (vacas).

Vacunaciones:

  • Aftosa: aplicada 2 veces al año.
  • Brucelosis: aplicada 1 vez al año, solamente en las hembras.

La alimentación del ganado

El objetivo de la alimentación de los animales es determinar la combinación óptima de los ingredientes disponibles para formar raciones que cumplan unas determinadas condiciones; estas condiciones suelen ser diferentes dependiendo del animal de que se trate. Así, en el caso de los animales de producción es fundamental que la ración proporcione al animal todos los nutrientes que necesita para conseguir un máximo rendimiento productivo en cuanto a cantidad y calidad de los productos, su coste sea el más bajo posible y prevenga la aparición de trastornos digestivos o metabólicos. En el caso de los animales de compañía no suele ser especialmente importante el coste de la alimentación, por lo que el objetivo básico de la ración es la prevención (y a veces el tratamiento) de trastornos para conseguir la mayor longevidad y bienestar del animal.
En todo caso, un aspecto cada vez más importante a considerar en la formulación de raciones es el impacto medioambiental de las heces y la orina (en particular la excreción de nitrógeno y fósforo)। La importancia que tiene poseer unos conocimientos adecuados sobre alimentación animal es diferente según la actividad profesional que se ejerza. En el caso del ganadero, la importancia de la alimentación animal es manifiesta, ya que uno de los aspectos mas importante que determina la rentabilidad de las explotaciones ganaderas es la eficiencia en el uso de los alimentos (la alimentación supone el 50-75 % de los gastos de estas explotaciones); no es por ello de extrañar que el desarrollo de la alimentación animal ha estado vinculado tradicionalmente a la alimentación del ganado, siendo el desarrollo de la alimentación de mascotas (perros, gatos, exóticos) relativamente creciente.

La piel

La piel marca el límite entre el organismo y su medio ambiente y contribuye en gran manera a la apariencia característica del individuo.
En el sistema completamente terrestre de vida, adoptado por la mayor parte de los mamíferos, las propiedades de los niveles superficiales son obviamente de primera importancia y la piel es una estructura elaborada, que muestra características especiales que no se encuentran en vertebrados mas inferiores। Estas características están conectadas con el control de la temperatura y con la formación de una superficie impermeable, aunque sensitiva, que sea capaz de resistir las fuerzas tensivas y prevenir el acceso de las bacterias.Aunque la piel es un material resistente, relativamente inerte, no se conserva invariable a lo largo de la vida sino que es renovada continuamente por la actividad de las células inferiores. Incluso la capa mas exterior del organismo no está, en consecuencia, en equilibrio estático, sino en estado dinámico, cambiando continuamente su material.


Set de fotos: